AMORES IMPOSIBLES

Quién diga que no ha tenido un amor imposible, miente. Y en verdad a medida que crecemos experimentamos un sin fin de situaciones y emociones que nos puede subir a tres metros sobre el cielo y luego no ponen los pies en la tierra.

¿Y qué es un amor imposible? Simplemente: ¡Alguien que nos encanta, que nos vuelve locos y por quien haríamos cualquier cosa! Aunque en el fondo sabemos que no se va a dar por millones de razones que quisiéramos cambiar y que no podemos.

Y es que no siempre se pueden vencer los obstáculos y obtener el amor deseado, hay leyes que se imponen como un muralla China que no se puede saltar. Ya sean religiosas, la situación social o profesional, compromisos anteriores, la edad o la distancia, etc. Sin duda alguna, son las responsables de los amores imposibles; amores que se quedan estancados en sólo una posibilidad y jamás en un hecho, amores que se resisten, que no son correspondidos y que siempre quedan pendientes, ya sea porque la chispa no prende o la magia no aparece. Pero también están aquellos en los que la magia existe y la chispa explota, pero siguen siendo amores imposibles.

Y pasa que de la nada sientes una atracción hipnótica por alguien, la cual puede durar un día, una semana o años. Esa misma atracción puede hacerte feliz, triste, ansioso(a), incapaz de confiar o hacerte celar sin ser nada. Y la verdad es que es de las peores sensaciones que se pueden experimentar, y el hecho de que se haga imposible hace que tu interés aumente en esa persona, la que muchas veces no tiene idea de tus sentimientos o simplemente no le interesas.

En ocasiones nos enamoramos de personas que no debemos o al menos socialmente no es correcto o también podemos enamorarnos perdidamente de personas famosas. Así es el amor, muchas veces surge con fuerza y no respeta leyes, imposiciones, pautas sociales, parentesco y un sin fin de trabas. Y a pesar de saber que no se puede dar, nos encanta tropezar con la misma piedra una y otra vez.

Pero, ¿Qué debemos hacer cuando nuestro amor es imposible? ¿Cómo debemos actuar? ¿Qué se puede hacer para que un amor imposible se haga posible?

A continuación, muchas respuestas:

Primero que todo hay que tener claro si tu amor es imposible o no. Es muy sencillo saberlo, pero si quieres toma papel y lápiz y enumera las razones o cosas que tendrían que cambiar para que ese amor se vuelva posible. Evalúa si esos aspectos que tendrían que cambiar se pueden cambiar o no, por ejemplo: Un cambio de actitud, un detalle o una decisión transcendental.

Seguido trata de identificar si lo que sientes verdaderamente es amor, un mero capricho o una obsesión sin sentido. Ya que muchas veces los amores imposibles pueden ser meros crush, los cuales por lógica de segundo de primaria nunca se van a dar; sé serio(a) contigo mismo(a), quiérete y mira para otro lado si ese es tu caso.

Si tu amor imposible no es como el caso anterior, continúa leyendo…

… Retomando al tema en cuestión, es importante evaluar los terceros que puedan salir afectados, recuerda el karma existe y como dice el dicho “No hagas con otros lo que no quisieras que hagan contigo”. A veces otra persona puede ser la que esté interfiriendo y quizás por ello las cosas no puedan darse, más no por ello tenemos derecho a pisotear o hacerle la vida imposible.

Piensa a fondo la situación, clarifica si vale o no forzar las barreras que los aleja,  analiza si tomar el riesgo pueda dañar o no la relación a futuro. Una de las cosas más importantes es evaluar cómo sería tu vida si las cosas se concretan, qué sacrificios tendrías que hacer, cómo cambiaría tu vida, qué costos estarías dispuesto a afrontar. Además analiza si eso verdaderamente te haría feliz, es lo más importante de todo.

También define si la otra persona está dispuesta asumir los mismos riesgos que tú, porque de nada vale que en tu mente hayas creado un: “Y vivieron felices por siempre”, cuando tu supuesta media naranja se está exprimiendo en otro jugo y no quiere dejar de hacerlo. Hay cosas que no sólo dependen de ti, sino de los dos y esto es un punto clave para ver si la situación tiene futuro o no.

Es de mucha ayuda compartir lo que te sucede con alguien de tu confianza, a menudo cuando exteriorizamos las cosas nos quitamos un peso enorme de encima y podemos pensar con los pies en la tierra. Un consejo no está de más, y mucho menos si viene de alguien que quiere lo mejor para ti.

Recuerda un amor en el que se sufre mucho, no es amor. Un romance real y seguro surge del trato diario y continuo, de conocerse día a día, y que a pesar de los defectos se encanten, disfruten de los momentos que viven juntos en cualquier circunstancia. Lo importante es que ambos sientan lo mismo, sin hacerle daño a nadie más.

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 Alvaro J Tirado R.

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